Todos los equipos corriendo Windows 98 y Windows NT, pueden ser expuestos a ataques externos.
Según anuncia Microsoft, existe un desbordamiento de buffer en una de las funciones del shell de Windows destinada a ayudar a localizar aplicaciones que no han sido completamente eliminadas de un sistema. El problema deriva en una vulnerabilidad de seguridad que puede llegar a permitir a un usuario construir un ataque de desbordamiento de buffer que conllevará la caída del shell de las versiones afectadas de Windows e, incluso, la ejecución de código. Por defecto, el mencionado problema no es explotable de forma remota. Sin embargo, bajo determinadas condiciones podrá ser explotado desde una página web. El boletín de Microsoft en el que se informa de este problema y de las direcciones donde acceder a las actualizaciones que lo corrigen, se encuentra disponible en: